Una de cada cinco administraciones españolas tiene cloud híbrida
La cloud híbrida se impone también entre los organismos públicos, dado que el 24% de las administraciones españolas apuestan por este modelo de gestión, según un reciente análisis realizado por AdjudicacionesTIC en colaboración con Cloudera y PUE.
El informe también detalla que más de la mitad de las entidades ya han dado el salto a la nube pero que no todas lo han conseguido. El 19,5% de los encuestados tiene en mente implementarlo en un periodo mayor a un año, y solo el 2% se encuentra en plena transición hacia un modelo híbrido.
En este sentido, son muchos los beneficios que las Administraciones Públicas destacan de los modelos en la nube. En concreto, la eficiencia y la reducción de los costes de infraestructura (58,7%), la disminución de los costes operativos (54%) y la calidad del servicio (54%) son las ventajas más destacadas.
Tratamiento de datos
Quienes han dado el salto con éxito a la nube aprovechan este potencial para aplicar tecnologías basadas en datos, como la inteligencia artificial o el Big Data, para la gestión de su información.
En este sentido, cabe señalar que, según el estudio ‘Implantación de Soluciones para Gestión de los Datos’, elaborado por AdjudicacionesTIC en colaboración con Cloudera y PUE, los organismos públicos se enfrentan a una multitud de desafíos en lo que al tratamiento de los datos se refiere. Así, el envejecimiento de los sistemas heredados o los ciberataques son algunos de estos retos. Entre todos ellos, los encuestados destacan la falta de personal (69,57%), la insuficiente cualificación (50%) o los silos de información (50%) como los más acuciantes para culminar su transformación digital y extraer todo el valor de este recurso.
La cloud híbrida es la elección mayoritaria entre las administraciones públicas (19,6% cloud privado, y casi el 20% cloud pública)
Uno de cada tres organismos (35%) asegura disponer de un sistema de gestión y análisis de datos masivos, tanto a nivel interno como externo. En cuanto al grado de madurez de estos modelos de análisis, el 46% manifiesta que entiende la importancia de los datos, pero trabaja en silos de información, es decir, se encuentra en un nivel más reactivo. Aún tienen margen de maniobra para implantar soluciones de analítica.
Así mismo, un 39% tiene decidido implementar un programa de transformación del gobierno del dato; por el contrario, un 19,57% tiene desconocimiento total de la utilidad, calidad y origen del dato.
En esta línea, los organismos públicos se plantean ciertos proyectos para implantar diferentes arquitecturas de datos en los próximos 12-16 meses. Entre los diferentes tipos destacan el data lakehouse (43,48%), seguido por mucha distancia por el data mesh (19,57%) y el data fabric (10,87%).
Cabe señalar que el estudio se ha elaborado a través de una encuesta enviada a más de 500 organismos públicos de las tres administraciones (Central, Autonómica y Local).
Preguntados para qué quieren esta estrategia del gobierno del dato, un 9% quiere dirigir la implantación de arquitectura de datos hacia áreas como la automatización, interoperabilidad o movilidad informática. La inmensa mayoría (80,42%) revela que estos cambios irán enfocados a la estructura interna del organismo; el 65,22% asegura que proyectan el cambio hacia los ciudadanos, y casi un 11% se enfoca en llevar a cabo un cambio por las relaciones con terceros, el personal interno, haciendas territoriales, municipios o hacia órganos de colaboración interadministrativa.
Las ventajas de implantar un modelo de análisis de datos son muchas. Mejora en la toma de decisiones (76%), facilidad para el análisis de los datos (61%), y optimización de los recursos y facilidad para el acceso al dato (52%, respectivamente), son los más destacados.