Dato público, dato gestionado: entre el legacy y el cloud

La gestión del dato es un desafío en las administraciones públicas, con obstáculos en la unificación y compartición de datos entre diferentes organismos y comunidades autónomas.

Esta fue una de las principales conclusiones extraídas del encuentro ejecutivo que tuvo lugar recientemente en Madrid y que reunió a algunos responsables de diferentes organismos públicos. En dicho encuentro, patrocinado por Cloudera y PUE, quedó patente la importancia del dato como un recurso valioso que puede mejorar los servicios y la toma de decisiones en diferentes sectores, pero también se identificaron algunos desafíos relacionados con la gobernanza, la cultura organizacional, la interoperabilidad y la protección de la privacidad.

Por ello, estos expertos consideran que es necesario promover cambios tanto a nivel tecnológico como en la mentalidad y enfoque de las organizaciones para aprovechar al máximo el potencial del dato.

El dato y la nube

El evento arrancó con algunas de las principales conclusiones extraídas de un informe realizado por AdjudicacionesTIC para Cloudera. Carlos Canitrot, director de consultoría, exponía que cada vez hay más datos que es necesario analizar para mejorar la vida de las personas. Según una encuesta de PUE y Cloudera encargada a Adjudicaciones TIC las AAPP cree que la cloud 55% mejora los costes, un 54% la mejora del time to market y la velocidad de integración. El 24% utiliza modelo híbrido mientras que cloud pública entrono al 20% y la privada un 19%. Un 19% de los organismos públicos no tiene estrategia cloud pero contempla incorporarla y un 9% ni siquiera se plantea la migración a la nube.

Además, este estudio constata que un 19% de AAPP tiene previsto implantar un modelo de gestión y analítica de datos y que, de ellos, 3 de cada 4 consultados creen que va a mejorar la toma de decisiones si se implanta ese modelo.

En cuanto a retos, casi 70% está la falta de personal y un 50% se queja de la falta de personal interno para llevar a cabo un modelo de gestión de datos. En un porcentaje inferior se quejaban de los silos de datos.

El evento, patrocinado por Cloudera y PUE, puso de manifiesto, tal y como recordaba José Luis Martínez, Executive Account Director Public Sector & Finance, que aunque se observa una tendencia hacia los proyectos cloud, “se reconocen las limitaciones y costes operativos en la parte pública. La hibridación, combinando el cloud y el on-premise, se plantea como una solución para brindar un servicio adecuado al ciudadano cumpliendo las normas regulatorias”.

Juan José Camacho, Director General de Salud Pública en Consejería de Sanidad de Castilla la Mancha, exponía que el reto principal es cambiar la cultura del manejo del dato, ya que en la organización aún persisten dinámicas anticuadas. “Existe una falta de conciencia sobre la importancia del dato para la toma de decisiones. La dificultad para contratar personal adecuado y los problemas de seguridad también se presentan”, aseguraba, lo que hace que “no se está aprovechando todo el valor de los datos, aunque se han logrado cambios positivos en la forma de trabajar”.

Una visión compartida por Ildefonso Vera, Director de Innovación, Procesos y Transformación Digital en ISDEFEl, para quien es vital “tener una estrategia de datos sólida, que incluya modelos, gestión y seguridad”. En ISDEFE, concretamente, “se prioriza la seguridad de los datos, implementando el Esquema Nacional de Seguridad”. Quien también coincidía en que la cultura es vital en el gobierno de datos es Enrique Martín, SE Director de PUE, quien destacaba la necesidad de cambiar la forma de trabajar desde el área de IT sin detener la operación.

Aunque ahora está involucrado en la Guardia Civil, Jesús Salvador Cano exponía su trabajo en el Tribunal Constitucional, que ha adoptado soluciones basadas en la nube para sus tareas ofimáticas, alabando “la incorporación de firma digital y el enfoque en la gestión de datos para garantizar la calidad de las resoluciones”.

Alfredo Rodríguez, Responsable Smart Products en INECO, exponía también la importancia de la colaboración con otras Administraciones Públicas en la gestión del dato. El legacy, la integración de datos dispersos y la calidad deficiente de algunos datos son “desafíos” pero ˝abordables gracias al uso de la tecnología”.

Mientras, Ángel Luis Sánchez, CTO del Sermás, considera que la historia clínica interoperable es “un avance básico en la interoperabilidad entre comunidades autónomas en España” aunque, en su experiencia, supone un desafío “la gobernanza y la tecnología en la gestión de datos de salud”. Algo para lo que, remarca, es de vital importancia “contar con personal experto y proporcionarles herramientas adecuadas”.

Por su parte, y aprovechando la problemática de la necesidad de una regulación para que los pacientes cedan sus datos, Ángel Alía, Responsable del Servicio de innovación Tecnológica y Seguridad de la Información en Guardia Civil, enfatizaba la importancia de utilizar tecnología verificada y certificada en la gestión de datos, especialmente de cara a compartir datos con otros organismos como las policías europeas. Algo para lo que resulta fundamental tener a un CISO y el responsable de datos en una organización.

Talento en datos

Jesús Salvador Cano añadía la importancia de la gestión del talento en la gestión del dato, destacando la necesidad de contar con expertos en el tratamiento del dato para lograr una gestión exitosa.

Algo que, en valoraciones de José Luis Martínez, puede suponer una verdadera dificultad, puesto que se observa “una falta de talento en muchos proyectos relacionados con el dato”. Aunque se menciona que la IA puede aportar soluciones, todos parecen ser conscientes de que no es la única respuesta, por lo que se sugiere la “implementación de metodologías ágiles para gestionar el talento”, siendo fundamental “aprovechar el valor del dato sanitario y la necesidad de establecer reglas y precauciones en su compartición”.

Para Ángel Alía, estamos ante la posible necesidad de una regulación para que los pacientes cedan sus datos, aunque el responsable de INECO matizaba que hay que diferenciar entre “la actitud de los ciudadanos al ceder datos a empresas privadas y su exigencia hacia los organismos públicos”. En este punto, considera que es también muy importante eliminar los datos que no se vayan a utilizar y proteger los datos necesarios.

Martínez preguntaba a los ponentes si conocen las soluciones existentes en el mercado para abordar los desafíos de gestión de datos y planteaba la opción de conocer con más detalle las prácticas exitosas que se han producido en otras instituciones para poder adaptarlas e imitarlas en otros organismos públicos, en lugar de desarrollar soluciones propias y a ciegas.

Para Ángel Alía, en cualquiera de los casos es fundamental contar con un CISO y un responsable de datos “para llevar a cabo una estrategia adecuada”. Además, entiende que es una obligación de la administración “hacer un uso ético y moral de los datos” y que se debería informar a los ciudadanos sobre el uso y compartición de sus datos para que el uso y aprovechamiento de los mismos no plantee ninguna problemática

Tal y como subrayaba Alfredo Rodríguez, “los ciudadanos son más exigentes con los organismos públicos en cuanto a la cesión de datos, mientras que ceden datos a empresas privadas sin problemas”, por lo que insistía en que es fundamental eliminar los datos innecesarios y proteger los datos que se requieren.

Conclusiones

El encuentro propició el resurgimiento de muchos de los retos y desafíos a los que se enfrentan las administraciones públicas en lo que a la gestión del dato se refiere y transitó por cuestiones técnicas y tecnológicas, pero también de derecho, legalidad y ética. La falta de personal y la falta de concienciación y estrategia desde la alta dirección fueron otros de los asuntos que se pusieron encima de la mesa.

En caulquierLa interoperabilidad es un aspecto fundamental en la gestión del dato, y aunque se han logrado avances básicos en ciertos sectores, aún existen limitaciones para lograr una verdadera integración y aprovechamiento del valor del dato.

La cultura organizacional y la gestión del talento son aspectos críticos en la gestión del dato. Es necesario contar con personal experto y fomentar una mentalidad de cambio y adaptación a las nuevas tecnologías y enfoques en el tratamiento de datos.

Existe una necesidad de establecer regulaciones y precauciones en la compartición de datos, especialmente en el ámbito sanitario, donde los datos poseen un valor gestor y de mercado significativo. Se busca encontrar un equilibrio entre la protección de la privacidad y el aprovechamiento de los datos para beneficio de la sociedad.

La implementación de tecnología verificada y certificada es crucial para garantizar una gestión eficiente y segura del dato. Además, se destaca la importancia de aprender de las experiencias y soluciones exitosas implementadas en otras instituciones.